El debate de los candidatos presidenciales de ayer quedará grabado en la historia como aquel en el que Alan García fue desenmascarado y sepultado políticamente. Fernando 'Popy' Olivera candidato a la Presidencia de la República pero, sobre todo, enemigo político de García consagró todo su tiempo del debate a recordar los casos de corrupción en los que García había sido vinculado, todos los crímenes y negociados que se habían cometido durante su gobierno, su fuga y su retorno, sus insultos y malos tratos contra el pueblo peruano. 

Este post es para completar lo dicho por Olivera y recordarles a los más jóvenes, a aquellos que votan por primera vez qué fue lo que pasó en los dos gobiernos de Alan García y qué hay detrás de todos esos casos que se mencionaron ayer.

Esta fue la primera frase de Fernando Olivera recordándole los casos por los que había sido investigado

Porque tiene que responder ante la justicia por el enriquecimiento ilícito, por el BCCI y los Mirage, y el fiscal Morgenthau. Por su departamento de París.

Todo empezó por el desbalance patrimonial

El 16 de agosto de 1990, cuando Alberto Fujimori ya había asumido el poder, se aceptó la creación de una comisión para investigar el desbalance patrimonial de Alan García. El motivo inicial de sospecha fue la compra dos casas, una en Chacarilla y la otra en Naplo.   

En ese momento, Popy Olivera diputado por el Frente Independiente Moralizador (FIM) y quien lideraba la Comisión investigadora le pidió a Pedro Cateriano, nuestro actual Ministro de Defensa, que sea también sea miembro de esta. 

Otro de los miembros de esta Comisión fue nada menos que Lourdes Flores Nano, así es, su actual aliada política fue quien en los años 90 tuvo la misión de encontrar pruebas creíbles para demostrar que Alan García había cometido delitos y merecía ser juzgado. Las vueltas que daría la vida.

Sigamos con el tema del desbalance patrimonial. Esto es lo que dice Cateriano en la página 24 de su libro El caso García, que escribió para reseñar cómo a pesar de las evidencias, García logró evadir la justicia y luego escapar del país. 

"Era improbable numéricamente imposible que García con sus sueldos de profesor de una universidad estatal, parlamentario y abogado semiclandestino, pudiera haber comprado las residencias que poseía. Así lo demostraríamos ante el Pleno del Congreso meses después" Pag.24

Fue esta misma comisión la que investigó a Alan García, además del desbalance patrimonial, por la compra de los aviones Mirage y por el caso del BCCI.

El Caso BCCI y los 3 millones de dólares de soborno

BCCI son las siglas de Banco Internacional de Crédito y Comercio  que fue uno de los bancos privados más poderosos en los años 1970 y 1980. Este banco llegó a operar en 78 países, con más de 400 sucursales y un capital de 20 mil millones de dólares. Sin embargo, en 1988 se descubrió que funcionarios de la sucursal del BCCI en Florida lavaban dinero proveniente del narcotráfico. A partir de ese momento, la justicia de Estados Unidos empezó una investigación exhaustiva llegando a demostrar que la mayoría de los capitales que manejaba el BCCI venían del tráfico de drogas de los carteles colombianos y del tráfico de armas. Se demostró además que entre los contribuyentes de este banco se encontraba nada menos que Alan García.

En Washington D.C. los miembros de la Comisión Olivera fueron informados que el fiscal del distrito de Nueva York, Robert Morgenthau se encontraba viendo el caso. Así, se descubrió que el Estado peruano pagó un soborno de 3 millones y medio de dólares a Leonel Figueroa y Héctor Neyra, Presidente y Gerente General del Banco Central de Reserva del Perú, para que transfirieran 215 millones de dólares al BCCI de Panamá. La transferencia se realizó los días 5 y 8 de mayo de 1986, es decir en pleno gobierno de García. 

Si quieren más detalles, aquí lo que dice Alfonso Quiroz en Historia de la Corrupción:

La compra de los aviones Mirage

Otro de los casos que vio la Comisión Olivera fue el tema de la compra de los aviones Mirage. Cuando Alan García asumió la Presidencia hizo un anuncio que desconcertó a muchos. Dijo que el Perú no iba a adquirir los 26 aviones Mirage que el gobierno del anterior presidente Fernando Belaúnde había encargado al gobierno francés, sino que solo compraría 12 de estos aviones. 

“Anuncio a los pueblos del mundo nuestra decisión de reducir sustancial­mente las compras de material bélico, comenzando por el recorte del núme­ro de aviones Mirage, cuya compra ac­tualmente está en trámite”

Sin embargo, lo que Carlos Malpica, miembro de la Comisión investigadora encontró fue lo siguiente: Alan García había hecho uso de su derecho sobre los 14 aviones restantes y a través de un amigo suyo, el conocido trafi­cante de armas Abderramán El Assir,  orientó la venta de estos aviones a otros países. Es decir, revendieron los 14 aviones Mirage a precios mucho más altos. Según Malpica, en esta operación García y su amigo El Assir se llevaron 100 millones de dólares.

Alfonso Quiroz además explica que esta fue una jugada desventajosa para el país pues en total se había dejado de ganar 300 millones de dólares. 

Según los contratos originales, si el gobierno francés hubiera dado su aprobación, el Perú podría haber revendido los catorce aviones no deseados con una ganancia gracias al alza del precio de las aeronaves en el mercado internacional.

La Comisión Olivera presentó pruebas por cada uno de estos casos y se logró llegar a una acusación constitucional pero posteriormente se dictó una resolución diciendo que no había lugar para iniciar instrucción contra García por no existir hecho delictuoso que acreditara un juicio. El expediente se archivó.

Lourdes Flores y Alberto Fujimori

Desesperada, según Pedro Cateriano en El Caso García, la propia Lourdes Flores Nano fue a buscar a Alberto Fujimori para que impida que se archive el caso:

 "Déjeme pensarlo", respondió Fujimori

Y dejó que todo se archive

"La imagen del Fujimori decidido, que quería acabar con la corrupción, perdía credibilidad; era solo palabrería de cierto sector de la prensa. En sus manos estuvo decidir que se investigara imparcialmente el caso, pero no lo hizo."

A estas alturas ya nada sorprende. Basta recordar que Alan García apoyó la candidatura de Alberto Fujimori contra Mario Vargas Llosa. Difícil de creer entonces que Fujimori le devolvería el favor a García permitiendo que se le acuse constitucionalmente.

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