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duelo después de los atentados. foto: infobae.com

Claves para entender por qué DAECH tiene a Bélgica en la mira

Hace algunos años Bélgica se ha convertido en el centro de operaciones de los yihadistas de DAECH. Todos los terroristas vinculados a los últimos atentados en Europa son belgas, han vivido  o han pasado por Bélgica antes de realizar sus ataques.

Publicado: 2016-03-25

Hace un par de años, Bélgica vivía casi ajeno a los problemas terroristas de Europa. Las medidas de seguridad antiterroristas no tenían nada que ver con las de España o las de Francia. Sin embargo, en 2014 la historia de Bélgica empezó a cambiar. 

En mayo de 2014, se dio la primera voz de alarma cuando se produjo un atentado contra el museo judío en Bruselas perpetrado por un yihadista francés. A partir de allí Bélgica, que hasta entonces no veía ninguna amenaza extranjera, descubrió que el atentado al museo no había sido un episodio aislado sino que era el resultado de un fenómeno había estado sucediendo en los últimos años sin que nadie lo percibiese, el de los combatientes extranjeros y que ha convertido a Bélgica en el refugio de muchos yihadistas.

Los combatientes extranjeros

Se llama así a los jóvenes con nacionalidad europea que abandonan su entorno para unirse a la guerra siria. Con casi 500 personas que en algún momento han viajado a Irak o Siria, el país, de 11.2 millones de habitantes era el que más yihadistas per cápita registraba en Europa en ese momento.

 “Esto significa que de una población musulmana de Bélgica de unos 640.000 individuos, hay uno de cada 1.260 que ha estado implicado en la yihad en Siria o Irak. En este momento Bélgica es, per cápita, de lejos la nación europea que más elementos extranjeros aporta a la guerra de Siria”, dice El arabista y experto belga Pieter van Ostaeyen.

Por ejemplo, en los atentados de París la historia de los terroristas belgas fue así:

La participación de Bélgica en la guerra en Siria e Iraq

Cuando en e año 2014, Bélgica decidió enviar 6 aviones cazabomarderos a Iraq, muchos de los políticos y autoridades belgas advirtieron que ese apoyo a la guerra de Estados Unidos tendría consecuencias para el país.  

La guerra tendrá un impacto económico nada oportuno en un período de crisis como este. El costo de la operación militar ha sido evaluado en 3.8 millones de euros por mes (calculados por tres meses de intervención) Pero no solo es eso, también cuenta  el encarecimiento de los derivados de petróleo que la guerra en el Medio Oriente puede provocar. 

En marzo de este año, Estados Unidos solicitó formalmente a Bélgica extender el período de su intervención militar en Siria contra DAECH ya que sus aviones de combate F-16 retomarán su misión a inicios de julio. 

De hecho, debido al acuerdo con los Países Bajos calificado como 'flip-flop" existe una alternancia de fuerzas aéreas holandesas y belgas sobre la operación. "La una representa a la otra" sostiene el politólogo especializado en cuestiones de defensa, Joseph Henrotin. 

La comunidad de Molenbeek

Moleenbek es una comunidad de Bruselas donde fue atrapado Salah Abdeslam, el terrorista acusado de haber planeado los atentados del 13 de noviembre de París. La Policía belga considera que es de este lugar de donde sale la mayoría de yihadistas de Bruselas. 

Este barrio empezó a prosperar a finales del siglo XVIII a causa de la revolución industrial. Su vinculación con la industria del acero durante la historia convirtió a Molenbeek en uno de los principales destinos para la inmigración, y a partir de los años 70 empezó a recibir a ciudadanos del norte de África, sobre todo de Marruecos. 

Además, el 6% de la población belga es musulmana. El porcentaje en Bruselas asciende al 25.5% (más de 250 mil personas). Sólo en Molenbeek hay 21 mezquitas. 

El problema es que los jóvenes de Molenbeek atraviesan una grave crisis de identidad, no se sienten ni belgas ni europeos y se convierten en presa fácil para los yihadistas. sobre todo teniendo en cuenta la marginalización e invisibilización a la que se han visto sometidos hace decenas de años. 

La web de 20minutos.es recoge algunos de los terroristas que perpetraron los más sangrientos atentados y que provenían de Molenbeek: 

- Los marroquíes Hassan El Haski y los hermanos Mimoun y Youssef Belhadj son considerados los cerebros de los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004 en Madrid, en los que murieron 191 personas. Los tres habían residido o residían en Molenbeek.

Mehdi Nemmouche. foto: mediapart.fr


 - Mehdi Nemmouche, el francés de origen argelino que perpetró, el 24 de mayo de 2014, un atentado en el Museo Judío de Bélgica, en el que murieron cuatro personas, preparó su asesinato en un piso alquilado en Molenbeek.

Amedy Coulibaly. foto: lemonde.fr

- En Molenbeek adquirió sus armas Amedy Coulibaly, el francés de origen maliense que en enero de este mismo año asesinó a cinco personas e hirió a otras diez en el ataque terrorista a un supermercado judío en Porte de Vincennes, en el 20º distrito de París, un día después de los atentados de Charlie Hebdo, en enero de 2015.

Ayoub El Khazzani. foto: nbcnews.com

- Ayoub El Khazzani, el marroquí de Tetuán que el pasado 21 de agosto intentó una masacre en un tren Thalys en Francia, residió en Molenbeek, donde tiene una casa una hermana, y acudía a la mezquita cinco veces al día.



Escrito por

Dánae Rivadeneyra

Periodista clásica. Leo, investigo, escribo y, como no puede ser de otra manera, me involucro. Ahora en París, ayer en Lima.


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