Tres razones por las que el pacto minero de Keiko Fujimori es una amenaza para el Perú
El pacto firmado por Keiko Fujimori con la Central Nacional de Mineros del Perú (Cenami) representa un peligro en caso Fujimori gane las elecciones presidenciales del 5 de junio. Este pacto apunta a la derogación de los decretos legislativos 1100 y 1105 que a su vez implicaría el regreso de las dragas, el adiós al reordenamiento territorial, y claro adiós también a los cinco años de trabajo y a los avances realizados por el Ministerio del Ambiente y el OSINFOR.
Hace unos meses les contamos en este post cómo así el gobierno de Alberto Fujimori había construido una minería irresponsable donde todas las ventajas eran para los empresarios inversionistas pero no se reguló debidamente el ingreso de grandes maquinarias como el uso de dragas, y mucho menos se previó un tipo de protección al medio ambiente. De ganar Keiko las elecciones, todo indica que la historia volvería a repetirse.
Como Jack, vayamos por partes para entender todo el tema.
¿Qué es el Decreto Legislativo 1100 y por qué es tan importante?
A inicios del año 2012, el gobierno emitió el DL.1100 donde se indicaba que todas las actividades mineras debían contar con la autorización del Ministerio de Energía y Minas (MEM). De no ser así, serían consideradas ilegales y sometidas a acciones de interdicción.
Además, este decreto prohibe en todo el Perú, el uso de dragas y otros artefactos similares en todos los cursos de aguas, ríos, lagos, lagunas, cochas, espejos de agua, humedales y aguazales. Antes esta prohibición solo estaba enfocada para Puno y Madre de Dios. En caso de encontrarse alguna de estas maquinarias, podrían ser decomisadas o destruidas por la Policía, la DICAPI siempre en presencia de un representante del Ministerio Público.
Otro punto a favor de este decreto es que generaba una suerte de comunicación y presión entre el OEFA, los gobiernos regionales, la Contraloría y la Procuraduría Especializada en Delitos Ambientales. Todo esto será eliminado si Keiko Fujimori cumple su promesa y deroga los decretos 1100 y 1105 como se ha comprometido.
Veamos algunas de las consecuencias:
1. El regreso de las dragas y de las tías Goyas
Con la derogación de estos decretos, el primer peligro es que regresen las dragas y todas las maquinarias que en su intento de obtener metales, ocasionan graves impactos de corto y largo plazo al ecosistema, ya que al remover grandes cantidades de sedimentos de los ríos se generan efectos contaminantes, se altera el cauce de los ríos, se ocasionan impactos biológicos, se destruyen los hábitats acuáticos, se altera el ecosistema y se destruye la vegetación ribereña.
Recordemos que fue durante el gobierno de Alberto Fujimori que se dio facilidad e incentivos para la importación de estos equipos. Fue gracias a estas medidas que las dragas comenzaron a poblar las orillas de los ríos en Madre de Dios. La propia Gregoria Casas, la Tía Goya, confirma que hasta antes del gobierno de Fujimori ella se dedicaba a la extracción a pequeña escala del oro, pero que esto cambió
"con Fujimori, cuando los empresarios de Lima nos vendieron maquinaria" y que en ese momento se dio "la fiebre de las máquinas".
2. Más oportunidades para la trata de personas
La trata de personas no es un problema lejano ni de otro mundo. Aquí un video que hice hace algunos años para INFOS, en un campamento de minería ilegal en Madre de Dios, con víctimas reales y sus tratantes.
El marco legal del decreto 1100 que se pretende derogar también regula temas vinculados a la lucha contra la trata de personas, la explotación de niños, y el contrabando de insumos que dañan el medio ambiente.
En el artículo 8 del D.L 1100 se especifica que en aquellos casos en los que como consecuencia de las acciones de interdicción "se identifiquen víctimas de trata de personas, trabajo infantil y trabajo forzoso, el representante del Ministerio Público remitirá la comunicación respectiva de manera inmediata al Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, a efectos de que realice las acciones conducentes a su atención y recuperación"
3. Minería en las áreas protegidas
Otra de las regulaciones que queda en el aire es la prohibición de realizar actividades mineras en zonas reservadas o protegidas. Con el D.L. 1100 se puso en marcha un proceso de reodenamiento territorial y se establecieron los límites en los que se podía existir minería.
Este es el mapa para Madre de Dios.
Con la derogación del D.L 1100 todo el trabajo realizado durante estos cinco años se iría al tacho. El esfuerzo y el dinero de los mineros y asociaciones que cumplieron con los trámites para dejar de ser informales, también se irían por la borda. El mensaje es claro. Aquellos que nunca quisieron formalizarse son los que saldrán ganando en un gobierno de Keiko Fujimori.
Escrito por
Periodista clásica. Leo, investigo, escribo y, como no puede ser de otra manera, me involucro. Ahora en París, ayer en Lima.