El 18% de la diversidad mundial de tiburones se encuentran en nuestro país, es  decir, en total son 68 especies las que habitan en nuestros mares. Ellos tienen una función vital en el equilibrio marino porque se encuentran en la cima de su cadena alimenticia. 

Si la cantidad de tiburones comienza a disminuir, se alteará directamente la cadena alimenticia y generará sobrepoblación de otras especies marinas, lo que podrían alterar drásticamente el ecosistema.

En este video elaborado por Univisión Noticias, se puede comprobar los peligros de reducir drásticamente la población de tiburones.

Las especies de tiburones en el Perú

El portal Océana Perú elaboró una lista de alguno de los tiburones que habitan en nuestro mar entre los que se encuentran el tiburón azul, el tiburón martillo o el tiburón diamante.

“Hoy en día, tiburones de todo tipo y tamaño nadan en el mar peruano, desde el gran tiburón ballena, el pez más grande del mundo que mide hasta 12 metros, hasta el popular tollo de leche que solo crece en promedio hasta 64 cm. Sin embargo, de las 68 especies de tiburones, 32 de ellas son las más pescadas y 6 de ellas las más relevantes a nivel comercial”.

Además, se menciona que muchas de estas especies ya vivían en las costas peruanas mucho antes de las primeras civilizaciones. Incluso existen registros del consumo de tiburones en las culturas Nasca y Lima.

Sin embargo, el problema está en que algunos tiburones se encuentran actualmente amenazados debido a la sobrepesca que realizan los pescadores artesanales en ciertas regiones del país.

Los tiburones están siendo amenazados en nuestro país

Según un estudio científico de González-Pestana, entre el 1950 y el 2010, en el Perú se pescaron un promedio anual de 6 mil toneladas de tiburones en la costa peruana. Lo que permite clasificar a algunas especies como “amenazadas”, según la clasificación de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Pese a que en nuestro país ya se cuenta con una ley para prohibir el consumo de algunos tiburones, aún se detectan dos problemas, como señala el portal Mongabay. El primero es que no todos los tiburones están protegidos y el segundo es que no se fiscaliza correctamente la pesca artesanal.

Pucusana y Chimbote son las zonas en las que más se pescan tiburones de manera indiscriminada y las especies más consumidas son: el tiburón diamante, el angelote o los llamados tiburones zorros.

Otro de los problemas es que muchos tiburones son vendidos al consumidor bajo la excusa de que son “tollos”, lo que agrava más el problema porque los consumidores no saben realmente qué están comiendo.

Otro de los grandes problemas que genera el sobreconsumo de tiburones es que se usan delfines como carnada para atrapar a los tiburones, esto está estrictamente prohibido. Sin embargo, la falta de fiscalización en alta mar permite que estas actividades sigan realizándose.

Si el Estado no comienza a regular la pesca indiscriminada, no amplía los periodos de veda (que solo se aplican para el tiburón martillo), pronto nuestro país perderá esa gran biodiversidad marina que hemos heredado desde hace miles de años.