La caía de la ciudad siria de Alepo en manos del gobierno de Bachar al-Asad, presidente de Siria, ha demostrado dos reacciones totalmente contrarias. Mientras una gran parte de los medios occidentales presentan la noticia como una tragedia total, otros medios de origen oriental, o con vínculos rusos, la presentan como una victoria.   

Veamos primero dos claros ejemplos de esta polarización mediática que se refleja en la opinión de la mayoría de ciudadanos del mundo.

Por un lado, AFP habla de un “régimen sirio”, una forma de desacreditar al gobierno de Bachar al-Asad, y asegura que su éxito militar se debe gracias a la ayuda de los “rusos, iraníes y el hezbolá libanés”, este último considerado un grupo terrorista por la mayoría de países de occidente. Mientras que califica a los opositores del régimen de Bachar como “rebeldes”.

Del otro lado, TeleSur habla de una “victoria” del “ejército sirio” contra los “terroristas” que estaban contra Bachar al-Asad. Además, se habla de una “celebración” de los sirios por la llegada de los militares a la ciudad de Alepo.

Es más, si observamos atentamente las imágenes que cada uno de ellos difunde veremos una realidad totalmente distinta. Cada uno construye la noticia desde una realidad diferente.

El medio árabe Al Jazeera reunió en un solo video ambas reacciones reales de la ciudad de Alepo que nos permiten entender mejor el complejo problema que divide a los mismos sirios.

Pero, ¿por qué la misma población de Alepo está dividida?

Antes de la caída de Alepo, la ciudad estaba literalmente dividida en dos. El este de Alepo había sido tomado por los rebeldes que están en contra de Bachar al-Asad, a quien califican de un dictador que viola los derechos humanos.

Mientras que el oeste, siempre fiel a Bachar al-Asad, se mantuvo como una ciudad pacífica e incluso sus autoridades hicieron un video para atraer turistas en plena guerra.

El problema desde luego son los civiles. La mayoría de civiles no ha podido salir del este de Alepo desde hace meses por los constantes bombardeos aéreos del gobierno sirio y sus aliados. Mientras que muchos rebeldes sirios han causado también la muerte de civiles en la zona del oeste de Alepo mediante morteros.

Así, la misma población de Alepo comenzó a alimentar un rechazo contra la otra mitad de su ciudad, alimentada por la propaganda del gobierno que los consideraban traidores y terroristas. Es por eso que muchas organizaciones internacionales consideran que las fuerzas militares están asesinando a los civiles del este por el solo hecho de vivir ahí, ya que los consideran potenciales terroristas.

Como los conflictos e intereses internacionales, tanto de Rusia que apoya al gobierno Siria como de Occidente que apoya a los rebeldes, parecen no terminar. Solo queda esperar que las organizaciones neutras consigan un acuerdo de ambas partes para que los civiles y niños pueden salir de esa guerra, antes de que sea demasiado tarde.