Los recursos naturales del planeta son consumidos todos los años por millones de personas, este consumo se realiza cada vez de forma más acelerada por lo que la capacidad del planeta de renovarse no es suficiente. 

Cuando se llega a este límite es cuando se habla del Día del exceso (en inglés Earth Overshoot Day) y según las organizaciones internacionales, hoy 2 de agosto es el día en el que hemos consumido más allá de lo que podemos regenerar. Vivir al crédito, le dicen también los especialistas.

Pero el problema de vivir al crédito con los recursos naturales es que cada año las fechas se van acortando más y más, y pese a la insistencia de los organismos internacionales como WWF y Global Footprint y las campañas de comunicación, nada parece detener nuestro ritmo voraz de vida.

Entre los recursos más preciados que ya hemos agotado para el 2017 se encuentran el agua, el suelo, el aire limpio, los productos alimenticios, entre otros. Si los próximos meses seguimos consumiendo tanto los recursos del 2018 también se irán acortando con mayor velocidad.

“Esto significa que en siete meses emitimos más carbono que los océanos y los bosques pueden absorber en un año, cogimos más peces, derribamos más árboles, cosechamos más y consumimos más agua de la que la Tierra puede producir en el mismo período", dicen en un comunicado las organizaciones WWF y Global Footprint.

La única forma en la que podamos seguir viviendo de esta forma es tener el equivalente de 1.7 planeta para poder satisfacer las necesidades actuales de todos y de la populación futura que sigue en constante crecimiento.

En 1970, década en la que se comenzaron a realizar estos cálculos sobre el consumo e impacto del hombre sobre la naturaleza, el Día del exceso se situaba solo a pocos días de terminar el año. Ahora se calcula que para el 2030, los recursos naturales anuales se acabarán en junio. Lo que será una catástrofe mundial.

¿Qué hacer para revertir esta realidad?

La organización OverShoot Day considera que las personas deben tomar consciencia sobre el impacto de sus acciones en el planeta y deben trabajar en mejorar su consumo y exigir a sus autoridades locales y nacionales en tomar medidas sobre este tema.

Una de las formas más eficaces que se pueden realizar de forma individual consiste en comprar los alimentos a productores locales y evitar hacerlo con industrias alimentarias, esto debido a que las industrias generan un mayor impacto en la naturaleza que los agricultores locales.

Para mejorar la calidad del aire de las ciudades -espacios al que la mayoría de la población acude saliendo de los campos- se recomienda movilizarse en bicicleta o vehículos no motorizados, ya que ellos no tendrán un impacto sobre la huella de carbono.

Además, renovar los aparatos electrónicos que consumen mucha energía por aquellos que cuiden el medio ambiente y que sean más eficientes con el consumo energético. Solo de esta forma se podrá evitar un mundo futuro sin recursos para todos.